¿Milei quiere privatizar la salud pública?
Al igual que pasó con el tema de la educación pública, periodistas y políticos afines al Gobierno Nacional o bien, no simpatizantes con Javier Milei, tergiversaron una vez más los dichos de éste. En varias de las notas periodísticas que el candidato a presidente se dispuso a dar, el mismo explicó que la situación de la salud pública en Argentina está en un punto de quiebre. No sólo tenemos hospitales y centros de salud que se llueven y están totalmente deteriorados, sino que no hay insumos médicos.
Por otro lado, los médicos, enfermeros y demás personal de salud, han sido castigados económicamente a lo largo de los últimos 15 años, viendo una desvalorización absoluta del poder adquisitivo. Gracias a la desatención e inoperancia del Estado, hoy en día la salud pública argentina está en coma.
Frente al actual desastre sanitario, Milei propuso cambiar el financiamiento de la salud, que siga siendo gratuita pero incorporando un sistema de vouchers. Al igual que la propuesta en el tema de educación pública, en ambos casos el servicio sigue siendo gratuito, lo que cambia es la forma en que se solventa.
A través del voucher, la persona elige el hospital o centro de salud público y se atiende gratis, como hoy en día. La diferencia recae del lado de la institución, es decir, el hospital o centro de salud. En vez de recibir una suma fija por parte del Estado, recibirá una suma equivalente a los vouchers que reciba.
Milei nunca propuso privatizar la salud pública
Formalmente, la propuesta presentada en la plataforma electoral por el partido La Libertad Avanza manifiesta en el temario «SALUD», página 7, inciso 1: «Que el achicamiento del estado y reducción del gasto público no disminuyan la calidad y cantidad de servicios que se presten ni el número o expertise de su personal.» Con esto, ya se sobreentiende que no se quitarán beneficios.
Javier Milei no propuso que la salud pública sea privatizada, eso es una mentira despiadada para engañar a la gente. De hecho, esta idea nunca fue una propuesta firme para un eventual próximo gobierno, sino más bien para un segundo período, ya sea de él o de otra persona. Esto mismo lo aclaró en varias oportunidades, y abarca tanto la propuesta de vouchers para la educación como de salud.
Ahora bien, ¿para qué serviría este cambio? Simple, para evitar el robo de dinero o los negociados del mismo Estado con las instituciones. Al ser la misma gente la que entrega el voucher, la institución recibirá el dinero por la atención que brinda. Al mismo tiempo, esto generará un mercado de competencia entre los hospitales y centros de salud públicos, los cuales deberán mejorar sus servicios para que la gente los siga eligiendo.
Por otro lado, el mercado empujará a las instituciones públicas a competir con las privadas, dado que, en esté último caso el voucher también servirá como medio de pago en las clínicas privadas. Es decir, la persona podrá elegir una institución pública la cual será totalmente gratis, o bien, dirigirse a una privada y pagar una parte de la atención con el voucher.
Medios, militantes y políticos embusteros, dejen de mentirle a la gente.
Estamos hartos de la CAMPAÑA DEL MIEDO.