Digamos Basta a los Trapitos en Paraná

La ciudad de Paraná no es la excepción con el problema de los llamados “trapitos”, a los que yo definiría como sujetos a los que hay que darles dinero para que no te rompan el auto, o la cara, como ha pasado recientemente en San Martín, provincia de Buenos Aires. Lo cierto es que estos sujetos deambulan por nuestra ciudad en distintas partes de la misma donde increíblemente está la Policía y agentes de tránsito municipal en frente de ellos, en frente de una actividad ilegal.

Los paranaenses nos vemos obligados a pagar a estos trapitos por obligación y miedo a que nos dañen el vehículo, y no porque se deba, ya que son lugares públicos de estacionamiento. Todos sabemos que si no les pagás, algo pasará, contigo o con tu vehículo, y de eso estamos todos de acuerdo.

La noche del sábado 23 de enero de este año, decidí salir con dos amigos al bar Cosmopolitan de calle Güemes yendo al Puerto, al cual llegamos en remís, pagando poco más de $12 cada uno. Al llegar, en la puerta había dos policías y un agente de tránsito municipal. Allí nos quedamos esperando a otro amigo que venía en su moto. Cuando éste llegó, estacionó sobre el cordón que da al bar, donde se dejan las motos: lugar público y reservado por el bar para sus clientes. Pero lo que es gratuito dejó de serlo cuando un trapito se le acercó para cobrarle. El tipo le exigió $25. Si mi amigo hubiera ido en remís, le hubiera salido $30. Tanto los policías como el agente municipal vieron toda la noche esta situación, porque estaban a unos 5 metros.

Todos los paranaenses estamos cansados de esta gente pero no somos nosotros los que tenemos que terminar con el vehículo roto porque no le quisimos pagar a estos tipos, tienen que ser las autoridades las que saquen a estos trapitos de las calles. ¿O hay que esperar que un joven termine con el cráneo roto como el de San Martín? No. Los trapitos están ejerciendo una violación a nuestras normas y un acoso a nuestra libertad. No somos dueños de dejar nuestro vehículo en un lugar público, eso dije «público», y estar tranquilos por las siguientes horas, porque el tipo te lo va a romper o rayar si no le pagás. Quiero decir, a las autoridades les digo, ¿se entiende lo que digo? o le pagás o te lo rompe.

Los paranaenses no queremos más a los trapitos y no queremos esperar a que pase lo que pasó en San Martín, por eso espero que la Municipalidad de Paraná tome acciones y «cambie» lo que no se ha cambiado en esta década anterior, porque la próxima vez voy a ir yo en mi vehículo, y no pienso soltar un peso por estacionar en un lugar público.